¿Qué esperan los empleados de la organización o de ti como supervisor?
Es importante que tú como supervisor sepas con bastante claridad lo que los miembros del equipo esperan de ti. Esto te permite saber lo que quieren, pero también si sus expectativas son realistas. ¿Los empleados esperan algo que sabes que es imposible? Es realmente importante descubrir estas expectativas. Si los miembros del equipo esperan algo que nunca les podrás dar, es poco probable que sean empleados satisfechos. Lo mismo ocurre con la organización: también debes averiguar qué esperan los empleados de ella. En estas conversaciones, es muy común descubrir las expectativas que los empleados tienen hace mucho tiempo. Por ejemplo, una mudanza planificada de la empresa puede haber sido mencionado en algún memorando, pero ese plan fue descartado más tarde. Las expectativas vacías como esta pueden ser muy estresantes para los empleados.
Como supervisor, ¿qué esperas de los empleados?
También es importante que los empleados sepan lo que tú y el empleador esperáis de ellos. Esta es la forma más concreta de decirles lo que necesitan lograr. Es probable que todos conozcan los objetivos KPI (indicadores clave de rendimiento) y, por supuesto, deberían conocerlos. Las cifras de KPI son importantes porque son metas concretas, pero las expectativas les dicen a los empleados cómo alcanzarlas.
¿Qué motiva a los empleados?
Cuando se hayan establecido expectativas claras, es hora de profundizar en la motivación. ¿Qué motiva al empleado? ¿Cómo quiere desarrollarse el empleado? ¿Cuáles son los objetivos profesionales del empleado? ¿Cómo puedes tú, como entrenador, ayudar al empleado con estas cosas? ¿Qué puede hacer el empleado para lograr estos objetivos? Es una buena idea tener esta conversación al mismo tiempo que la conversación sobre expectativas porque puede sacar a la luz algunos conflictos que luego se pueden resolver rápidamente.
¿Cómo hacerlo en la práctica?
Dedica al menos media hora para hablar estos asuntos con cada empleado en una sala de conferencias u otro espacio tranquilo. Elabora una agenda de antemano para que sea más fácil centrarse en el tema. Apunta el contenido de vuestra conversación y entrégale una copia al empleado también. Esta conversación debe tener lugar al menos dos veces al año para que ambos estéis actualizados.
Agenda sugerida para una conversación sobre expectativas:
- Las expectativas del empleado hacia el supervisor y el empleador:
- Las expectativas del empleador y del supervisor hacia el empleado:
- ¿Qué motiva al empleado?
- ¿Cuáles son los objetivos profesionales del empleado?
- ¿Cómo puede el supervisor ayudar al empleado a alcanzar estos objetivos?
- ¿Qué puede hacer el empleado para alcanzar estos objetivos?
¡Ahora estás listo para discutir las expectativas! Espero que estas conversaciones sean útiles y gratificantes para ti, tus empleados y tu organización.
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